Todas las personas que amablemente se han prestado a responder nuestras preguntas coinciden en que el impacto de las Redes Sociales y las nuevas plataformas multimedia en el mundo de la moda ha sido incalculable. La instantaneidad con la que se puede compartir una información ha puesto en aprietos a las publicaciones convencionales que, salvo excepciones, tienen una periodicidad mensual, pero han aprendido a convivir hasta el punto en el que algunas blogueras han pasado a formar parte del equipo de revistas como Vogue, Glamour o Elle.
Además, las redes sociales han ayudado a democratizar el sector ya que cualquiera puede ofrecer publicidad sin coste alguno y tener la oportunidad de difundir contenido en un mundo que dejó de ser exclusivo.
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